Pensamiento económico y humanismo de Ernesto -Che- Guevara

1. Recuperar a Marx en el pensamiento  de Ernesto Che Guevara.

Como en Marx, en el Che no existe un pensamiento restrictivamente económico. Imbuido está de la tesis 11 de Marx sobre Feuerbach: “los filósofos no han hecho más que interpretar de diversos modos el mundo, pero de lo que se trata es de transformarlo”³. Por ello la economía, la política y la ideología aparecen articuladas como partes de un solo propósito: la liberación humana.

Los momentos dedicados a la estructura económica, muchas veces quedan explicitados desde la súper estructura y la conciencia que se toma de los conflictos de ambos planes y sale empapada de racionalidades ideológicas según las clases que participan en el conflicto.

Cómo ser economista, político o ideólogo de manera unilateral si se es revolucionario como el Che, que busca superar los antagonismos de clases según la propia lucha los ponga en primer plano, hasta superarlos todos por haber superado las clases. 

El libre desenvolvimiento humano que busca el Che para cada quien será la condición del libre desenvolvimiento de todos.

Este pasaje, como meta revolucionaria del Che y de Marx desde el poder político del proletariado, (mucho mejor concepto que dictadura del proletariado), a la inexistencia del poder político de clase alguna y por ello el reino de la libertad y de la humanidad socializada, es lo que permite entender la praxis del Che que es un escándalo mayor aún que el provocado por su teoría.

El aserto es de Rodney Arismendi⁴ y nos recuerda las valoraciones por parte del Che:

• Del campesinado en vías de proletarización al lado de la clase obrera.
• De la pequeña burguesía en vía de proletarización al lado de la clase obrera.
• De lo popular al lado de lo proletario.
• De lo rural al lado urbano.
• De la lucha armada al lado de la lucha pacífica.
• De la guerrilla al lado de los métodos tradicionales de lucha.
• Del imperialismo al lado de los capitalistas puros y simples.
• Del socialismo y el comunismo al lado de la revolución democrática.
• Los valores de uso no capitalistas al lado de los valores de cambio.
• La ley del valor y su disolución.
• Del hombre nuevo al lado del hombre viejo.
• Del partido marxista-leninista, flanqueado con el apoteg-ma de Martí: todo hombre verdadero debe sentir en su mejilla el golpe dado a cualquier mejilla de hombre.

Ese fue su “escándalo en el plano de la teoría”. Pero, ¿y en la acción?… en Argentina, en Guatemala, en Cuba, en África, en Bolivia. Se trata de otro (escándalo) mayor en el plano de la acción. De un escándalo práctico.

Resaltada esta aclaración puede entonces entenderse la fuerza desplegada por el Che en la defensa de la concepción de Marx sobre el valor. Su intransigencia frente a cubanos y extranjeros defendiendo las aristas más intrincadas de la ley del valor con su debilitamiento tendencial en la etapa socialista y su inexplicable desaparición en la etapa comunista, como cuestión previa a la desaparición del fetichismo, la alineación y la condición de mercancía de la riqueza social, incluida la fuerza de trabajo asalariada.

Ernesto Che Guevara, que a los ojos de muchos no persuadidos de la posibilidad de su humanización parecía un temerario, resultó ser un Titán de luz, llamado hoy a esclarecer a muchos revolucionarios, muy buenos en el plano moral, pero provisto de muy malos proyectiles ideológicos, como él decía.

Desde cierto punto de vista, este esclarecimiento se requiere en Cuba, mucho menos que en el resto de América y más allá de América.

2. Reforzar la concepción humanística del Che Guevara después de su muerte

En el plano humanístico sucede otro tanto. El humanismo en el Che es una actitud permanente, no porque realice acciones caritativas, filantrópicas o piadosas. El humanismo del Che se expresa en su conducta cotidiana de combate contra todos los antagonismos sociales y nacionales que impiden el desarrollo pleno de sus contemporáneos, justamente porque unos países y unos hombres o mujeres viven de otros, al explotarlos, al oprimirlos o simplemente dificultar su desarrollo pleno.

El humanismo de Ernesto Guevara, por ser el mismo de Marx, sus seguidores y superadores (como es el propio Che) lo conduce a la inversión de sus energías, habilidades y cuanto fuera preciso, incluida la vida en el acercamiento de esta etapa en que la humanidad se socializa por haber superado sus antagonismos.

Ernesto Guevara no podía luchar simplemente por el poder político, pues estaba convencido que ese poder en cualquier modalidad se fundamenta en algún antagonismo de clase. Él, ni luchaba por el poder estatal ni por el simple poder de clase en general, sino por el poder del proletariado, porque está inhabilitado para perpetuar su disfrute y por otro lado inducido a disolver todo poder político y todo Estado.

3. ¿Qué puede enseñar Ernesto -Che- Guevara a los revolucionarios dominicanos?

1. Existen revolucionarios de por vida.

2. Que el revolucionario de época debe ser marxista con la misma naturalidad con que se es newtoniano en física o pasteuriano en biología, considerando que si nuevos hechos determinan nuevos conceptos, no se quitará nunca su parte de verdad a aquellos otros que hayan pasado⁵. 

3. El imperialismo, al contrario de algunos grupos progresistas, sí aprende de sus errores.

4. La real capacidad de un revolucionario se mide por saber encontrar tácticas revolucionarias adecuadas en cada cambio de la situación, en tener presente todas las tácticas y en explotarlas al máximo. Sería un error imperdonable desestimar el provecho que puede obtener el programa revolucionario de un proceso electoral dado; del mismo modo que sería imperdonable limitarse tan sólo a lo electoral y no ver los otros medios de lucha, incluso la lucha armada, para obtener el poder, que es el instrumento indispensable para aplicar y desarrollar el programa revolucionario, pues si no se alcanza el poder, todas las demás conquistas son inestables, insuficientes, incapaces de dar soluciones que se necesitan, por más avanzadas que puedan parecer⁶. 

5. Días negros esperan a América Latina; y las últimas declaraciones de los gobernantes de los Estados Unidos parecen indicar que días negros espera al mundo⁷. 

6. Queda como única posibilidad el desarrollo cada vez más impetuoso del mercado común europeo, bajo la dirección germana, que pudiera alcanzar la fuerza económica suficiente como para competir en estas latitudes con los capitales yanquis.

Los días para América Latina y el mundo resultaron más negros que cuanto suponía el Che desde cierto punto de vista. La estrategia imperial conocida por el Che en sus tres componentes de: a) Guerra antisubversiva, b) Guerra subversiva dentro de los países que intentan la superación del capitalismo, c) Guerra atómica, discurre a favor del primero. Junto con ello la tercera revolución industrial amplía y profundiza los espacios a ocupar por el trabajo y los revolucionarios en todas sus modalidades: socialistas y comunistas, demócratas, religiosos liberacionistas, etc.

Por la riqueza del acervo guevariano es particularmente importante su difusión. Es este momento de la historia dominicana cuando la consolidación de las fuerzas contrarias a la revolución de abril, el martirio de sus grandes líderes a lo largo de todo el siglo, el relanzamiento de los métodos de dominio trujillistas y balagueristas, provoca la impresión de que estamos partiendo de cero.

Sin embardo, el aporte del Che en la situación enédica de los años 60 nos ayudará enfrentar la situación más inédica aún de los años 90.

Con su ejemplo teórico y práctico podremos entrever con claridad un acercamiento entre la ciencia y la técnica; entre lo urbano y lo rural; entre el trabajo físico e intelectual; entre los roles de hombres y mujeres; entre las diversas razas del mundo; entre los centros y sus periferias; entre el trabajo teórico y el práctico.

Podremos aprovechar el derrumbamiento de los mitos basados en la explotación y la opresión; el debilitamiento de los tabúes religiosos y no religiosos; las expectativas de autogestión y descentralización a escala mundial.

Finalmente podríamos recuperar la perspectiva humana que en su límite progresivo puede tener la robotización de la producción, la clonación tomada como selección artificial y de manera particular la descodificación de la propuesta capitalista de globalización forzada y entrever las perspectivas reales de la internacionalización de los procesos productivos, las instituciones y la cultura.

Referencias

Arismendi, Rodney: Problemas de una revolución continental, 2 volúmenes. Montevideo: Ediciones Pueblos Unidos, 1962.

Castro, Fidel, Discursos, 3 Tomos. La Habana: Editorial de Ciencias Sociales, 1979.

Castro, Fidel, La Revolución cubana. La Habana: Ediciones Era, 1972.

Guevara, (Che) Ernesto, Escritos y discursos, La Habana: Editorial de Ciencias Sociales, 1977.

Guevara, (Che), Ernesto, Obra revolucionaria. México: Ediciones Era, 1974.

Marx, Carlos y Federico Engels, Obras escogidas, 3 Tomos. La Habana: Editora Política, 1963. (Incluye: Ludwig Feuerbach y el fin de la filosofía clásica alemana)